1. El objetivo final del manejo del paladar hendido es no solo cerrar la hendidura. Lo fundamental es reconstruir la función velo faríngea, para así obtener un habla normal, pero sin alterar demasiado la oclusión o el crecimiento facial.
2. El paladar hendido es corto y los músculos están insertados de manera anormal en los bordes posteriores del paladar óseo. Hay una deficiencia de tejido blando lo cual incluye tanto la mucosa como el músculo contiguos a la hendidura.
3. El paladar hay que alargarlo para que cuando se contraiga toque la pared posterior de la faringe.
4. Si no se opera el paladar el crecimiento dentofacial va a ser prácticamente normal pero el habla no.
5. El momento ideal para hacer la cirugía esta determinado por un balance entre el crecimiento y la fonación. Entre mas temprana la cirugía mas posibilidades de hablar normalmente, pero a su vez mas posibilidades de alteraciones del crecimiento. Lo contrario si se hace la cirugía más tardíamente, es decir mejor crecimiento maxilofacial pero peor habla.
6. Un habla incompresible es más limitante para el desarrollo de la persona que los problemas de oclusión.
7. Las alteraciones del crecimiento facial pueden ser corregidas tardíamente mediante diferentes técnicas, lo cual es mucho más difícil en el caso de un habla alterada. Eso no quiere decir que se olvide del crecimiento facial, este debe ser estimulado y manejado por el equipo interdisciplinario. Con frecuencia no se puede tener todo como es lo ideal, en el caso del paladar hendido obtener un habla normal es la prioridad.